El Atributo Divino de la Indulgencia

Sagrado Corán: La Recompensa de la Paciencia

وَلَا تَسۡتَوِي الۡحَسَنَةُ وَلَا السَّيِّئَةُ ؕ اِدۡفَعۡ بِالَّتِيۡ هِيَ اَحۡسَنُ فَاِذَا الَّذِيۡ بَيۡنَكَ وَبَيۡنَهٗ عَدَاوَةٌ كَاَنَّهٗ وَلِيٌّ حَمِيۡمٌ‏

“Y no pueden igualarse el bien y el mal. Repele el mal con lo que sea mejor y, entonces, aquel entre el que y tú existía enemistad se volverá como un amigo entrañable.”

— Sagrado Corán (Ha Mim As-Sayda, 41:35)

Hadiz: Una Oración para Tiempos de Angustia

Hazrat Abdul’lah bin Abbas (ra) narró que en momentos de grave angustia, el Santo Profeta (sa) solía recitar la siguiente oración: “La ilaha il’lal’lahul-halimul-karim, subhanal’lahi rab’bil-arshil-adim, subhanal’lahi rab’bis-samawatis-sabi wa rab’bil-arshil-karim.”

[No hay más dios digno de adoración que Al’lah, el Indulgente, el Clemente. Santo es Al’lah, Señor del Gran Trono. Santo es Al’lah, Señor de los siete cielos y Señor del Noble Trono.]

— Sunan Ibn Maya, Kitab-ud-Dua’, Hadiz: 3883

Escritos del Mesías Prometido (as): Indulgencia y Resistencia

“Una vez, un enviado vino al Santo Profeta (sa). Extendió repetidamente su mano hacia la barba bendita del Santo Profeta (sa), y Hazrat Umar (ra) apartaba su mano con su espada. Finalmente, el Santo Profeta (sa) detuvo a Hazrat Umar (ra). Hazrat Umar (ra) declaró: ‘Está cometiendo tal insolencia que deseo matarlo’. Sin embargo, el Santo Profeta (sa) soportó toda su impertinencia con indulgencia.”

— Malfuzat, Vol. 5, p. 324, Edición de 1988

Hazrat Sheikh Yaqub Ali Irfani (ra) relató: “Este incidente tuvo lugar en la casa conocida como la de Mahbub Rai. Hasta donde recuerdo, un líder Brahmo (creo que era Anbash Mozumdar Babu) le estaba haciendo algunas preguntas al Mesías Prometido (as), y él (as) estaba respondiendo. Mientras tanto, llegó un adversario de lenguaje soez y lanzó ataques muy hirientes y viles directamente contra él (as). Esa escena todavía está ante mis ojos. Él (as) tenía la mano sobre la boca, como era a menudo su costumbre, para cubrirse la boca con una parte del chal de su turbante o, a veces, solo con la mano. Permaneció en silencio mientras la otra persona continuaba su diatriba. Él (as) se sentó tan absorto y ensimismado como si nada estuviera sucediendo, como si alguien estuviera entablando un discurso muy dulce. El líder Brahmo intentó detenerlo, pero la persona no hizo caso. El Mesías Prometido (as) le dijo al líder Brahmo: ‘No le diga nada, déjelo hablar’. Finalmente, la persona se cansó de su propia perorata y se fue. El líder Brahmo quedó profundamente impresionado y dijo: ‘Este es un gran milagro moral de usted’. En ese momento, el Mesías Prometido (as) podría haberlo silenciado o haberlo hecho sacar de su casa. Y debido a su lenguaje abusivo, su lengua podría haber sido cortada con solo el más mínimo gesto de él (as). Pero el Mesías Prometido (as) dio una demostración práctica de su perfecta indulgencia y autocontrol.”

— Sirat Hazrat Masih-e-Maud (as), por Sheikh Yaqub Ali Irfani (ra), pp. 426-427

Guía de Hazrat Jalifatul Masih V (atba): El Atributo Divino de Al-Halim

“Uno de los atributos de Al’lah el Exaltado es Halim [El Indulgente], que, cuando se usa para Dios Todopoderoso, significa el Ser Misericordioso, el Perdonador, Aquel que pasa por alto. Es decir, en el caso de la desobediencia, Él no descarga inmediatamente Su ira sobre los desobedientes. La desobediencia no lo provoca. Además, Él es el Ocultador de faltas. Es como si este atributo de Al’lah el Exaltado abarcara los significados de varios atributos. Él es también Rahim [el Misericordioso], Gafur [el Perdonador], y Sat’tar [el Ocultador de faltas]. Sin embargo, cuando una persona comienza a transgredir persistentemente los límites establecidos por Al’lah el Exaltado, entonces, si Él así lo desea, entran en acción aquellos de Sus atributos que implican la captura y el castigo. En el Sagrado Corán, Al’lah el Exaltado ha mencionado en varios lugares que Él no se apresura en castigar. Porque si Dios Todopoderoso se apresurara en castigar, entonces el hombre, que es la encarnación del pecado, sería castigado por cada pecado y crimen. De hecho, Al’lah el Exaltado declara que da un respiro incluso a los grandes pecadores, incluso a los incrédulos y a aquellos que causan dolor y sufrimiento a los Profetas. Como Él declara: ‘Y si Al’lah castigara a los hombres por sus malas acciones, no dejaría sobre la tierra a ninguna criatura viviente; mas les concede una prórroga hasta un plazo prefijado; y cuando llega su plazo, no pueden retrasarlo ni una sola hora, ni tampoco adelantarlo’. (An-Nahl:61). Así que, esta es la respuesta para aquellos que no creen en Dios, que tratan a los Profetas con burla, y que han sido completamente cegados por el glamour del mundo, que Al’lah ciertamente castiga a los que hacen el mal y se burlan de Sus amados. Por lo tanto, no piensen que si Al’lah nunca los ha castigado o si Su castigo aún no ha llegado, entonces —Dios no lo quiera— los Profetas de Al’lah son falsos o que Dios no existe.”

— Sermón del viernes, 14 de marzo de 2008, Al-Fazl International, 4 de abril de 2008

Conclusión

Esforcémonos por adornar nuestro carácter con el ropaje de la indulgencia, reflejando el atributo divino de Al-Halim. En cada prueba, mostremos paciencia y respondamos a la dureza con amabilidad. Porque es en el control de nuestras pasiones y en la muestra de misericordia a la creación que podemos acercarnos verdaderamente a nuestro Creador Misericordioso y ser merecedores de Su gracia. Que Al’lah nos permita hacerlo.

The Divine Attribute of Forbearance (English Translation)

Qur’an: The Reward of Patience

وَلَا تَسۡتَوِي الۡحَسَنَةُ وَلَا السَّيِّئَةُ ؕ اِدۡفَعۡ بِالَّتِيۡ هِيَ اَحۡسَنُ فَاِذَا الَّذِيۡ بَيۡنَكَ وَبَيۡنَهٗ عَدَاوَةٌ كَاَنَّهٗ وَلِيٌّ حَمِيۡمٌ‏

“And good and evil are not alike. Repel evil with that which is best. And lo, he between whom and thyself was enmity will become as though he were a warm friend.”

— The Holy Qur’an (Ha Mim As-Sajdah, 41:35)

Hadith: A Prayer for Times of Distress

Hazrat Abdullah bin Abbas (ra) narrated that at a time of severe distress, the Holy Prophet (sa) used to recite the following prayer: “Lā ilāha illallāhul-ḥalīmul-karīm, subḥānallāhi rabbil-‘arshil-‘aẓīm, subḥānallāhi rabbis-samāwātis-sab‘i wa rabbil-‘arshil-karīm.”

[There is no god worthy of worship except Allah, the Forbearing, the Gracious. Holy is Allah, the Lord of the Great Throne. Holy is Allah, the Lord of the seven heavens and the Lord of the Noble Throne.]

— Sunan Ibn Majah, Kitab-ud-Dua’, Hadith: 3883

Writings of the Promised Messiah (as): Forbearance and Endurance

“Once, an envoy came to the Holy Prophet (sa). He repeatedly extended his hand towards the blessed beard of the Holy Prophet (sa), and Hazrat Umar (ra) would push his hand away with his sword. Finally, the Holy Prophet (sa) stopped Hazrat Umar (ra). Hazrat Umar (ra) submitted, ‘He is committing such insolence that I desire to kill him.’ However, the Holy Prophet (sa) endured all his impertinence with forbearance.”

— Malfuzat, Vol. 5, p. 324, 1988 Edition

Hazrat Sheikh Yaqub Ali Irfani (ra) stated: “This incident took place in the house known as Mahbub Rai’s. As far as I can recall, a Brahmo leader (I believe it was Anbash Mozumdar Babu) was asking the Promised Messiah (as) some questions, and he (as) was replying. In the meantime, a foul-mouthed opponent arrived and launched some very hurtful and vile attacks directly at him (as). That scene is still before my eyes. He (as) had his hand over his mouth, as it was often his custom, to cover his mouth with a part of his turban’s shawl or sometimes just his hand. He remained silent while the other person continued his tirade. He (as) sat so absorbed and engrossed as if nothing was happening, as if someone was engaged in a very sweet discourse. The Brahmo leader tried to stop him, but the person paid no heed. The Promised Messiah (as) told the Brahmo leader, ‘Do not say anything to him, let him speak.’ Ultimately, the person got tired of his own ranting and left. The Brahmo leader was deeply impressed and said, ‘This is a great moral miracle of yours.’ At that moment, the Promised Messiah (as) could have silenced him or could have had him removed from his house. And due to his abusive language, his tongue could have been cut out with only the slightest gesture from him (as). But the Promised Messiah (as) gave a practical demonstration of his perfect forbearance and self-control.”

— Sirat Hazrat Masih-e-Maud (as), by Sheikh Yaqub Ali Irfani (ra), pp. 426-427

Guidance from Hazrat Khalifatul Masih V (atba): The Divine Attribute of Al-Haleem

“One of Allah the Exalted’s attributes is Haleem [The Forbearing], which, when used for God Almighty, means the Merciful Being, the Forgiver, the One who overlooks. That is, in the case of disobedience, He does not immediately send down His wrath upon the disobedient. Disobedience does not provoke Him. Furthermore, He is the Concealer of faults. It is as if this attribute of Allah the Exalted encompasses the meanings of several attributes. He is also Raheem [the Merciful], Ghafoor [the All-Forgiving], and Sattar [the Concealer of faults]. However, when a person persistently begins to transgress the boundaries established by Allah the Exalted, then, if He so wills, those of His attributes which involve seizure and punishment come into action. In the Holy Qur’an, Allah the Exalted has mentioned at various places that He is not hasty in seizing. For if God Almighty were to be hasty in seizing, then man, who is an embodiment of sin, would be punished for every sin and crime. In fact, Allah the Exalted states that I give respite even to the great sinners, even to the disbelievers and those who cause pain and suffering to the Prophets. As He states: ‘And if Allah were to punish men for their wrongdoing, He would not leave on it [the earth] a single living creature, but He gives them respite till an appointed term; and when their term is come, they cannot remain behind a single moment, nor can they get ahead of it.’ (An-Nahl:62). So, this is the answer for those who do not believe in God, who treat the Prophets with mockery, and who have been completely blinded by the glamour of the world, that Allah certainly seizes those who do wrong and mock His beloved ones. Therefore, do not think that if Allah has never seized you or if His punishment has not yet come, then—God forbid—the Prophets of Allah are false or that God doesn’t existence.”

— Friday Sermon, 14th March 2008, Al-Fazl International, 4th April 2008

Conclusion

Let us strive to adorn our character with the raiment of forbearance, reflecting the divine attribute of Al-Haleem. In every trial, let us exhibit patience and respond to harshness with gentleness. For it is in controlling our passions and showing mercy to creation that we may truly draw near to our Merciful Creator and become deserving of His grace. May Allah enable us to do so.